ya nada queda que no sea comestible a no ser la poesía. Con ella sera posible tomar de nuevo la vida en nuestras manos, quitarle los dientes a los ojos, dejar los dedos descifrar los besos, a los oídos abrazar silencios del mismo tamaño que las voces.DAME UNA PALABRA Y MOVERÉ EL MUNDO
especular es mirarse y reconocerse, no en el espejo sino en el otro, en el que nos mira, y si se alean las dos miradas, un nosotros nos multiplica reconociéndonos cada uno en el otro antes de cerrar los ojos.